Altas temperaturas y EPOC.
Una vez superada la primera ola de calor de este año y empezando un verano que se prevé muy caluroso, vamos a revisar algún estudio y hacer unas reflexiones acerca del calor y la patología respiratoria crónica, pues es una de las preguntas más frecuentes en estos tiempos.
Un estudio publicado en 2014, realizado en la universidad de Johns Hopkins, en Baltimore y presentado en la conferencia internacional de la Sociedad Torácica Americana, demostró que los enfermos de EPOC que estaban expuestos a temperaturas interiores más altas, padecían mayar morbilidad relacionada con la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, con aumento de los síntomas, disminución de la función pulmonar y por lo tanto un aumento del tratamiento farmacológico de rescate. También demostró que el aumento de temperaturas al aire libre incrementaba los síntomas de la EPOC, lo cual tenemos que tener muy en cuenta ya que la tendencia actual es a un aumento general de la temperatura.
La Dr Meredith McCormarck, principal autora del estudio, hace hincapié en estudiar el impacto del calor en la patología respiratoria, que ya se ha asociado a una mayor mortalidad y hospitalización, para así poder anticiparse y preparar los efectos del cambio climático.
El estudio se realizó con ochenta y cuatro pacientes que habían abandonado el hábito del tabaco y estaban diagnosticados de EPOC moderada o grave. Estos pacientes fueron sometidos a tres periodos de análisis de una semana con intervalos de tres meses de diferencia. En el estudio se controló diariamente la temperatura del domicilio y la temperatura exterior, haciendo mediciones diarias de sus síntomas, como es la disnea, tos, producción de moco, función pulmonar y necesidad de medicación de rescate. Para ello se analizó la temporada de verano cuando la temperatura eran mayores de 32,2 grados centígrados, estudiando un total de 602 días y solicitando al paciente que saliera al aire libre solo el 48% de esos los días.
Las conclusiones de este estudio fueron que el aumento de temperatura del domicilio se relacionaba con un aumento significativo de los síntomas, con disminución de la función pulmonar y mayor necesidad de la mediación de rescate. En los periodos que pasaron en el exterior, el calor se relacionó con un incremento significativo de los síntomas, sin afectar significativamente a la función pulmonar y al uso de fármacos de rescate.
Hay que mencionar que en el estudio se tuvo en cuenta el aumento de contaminación del aire por el calor, manteniendo las mismas conclusiones sin dar mucha importancia a este fenómeno.
Este estudio nos hace pensar y reflexionar cada vez más sobre la adaptación de los tratamientos de la EPOC en periodos de calor, para disminuir los síntomas de la enfermedad y mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes.
Desde el Centro de Fisioterapia Respiratoria Doctor Fleming recomendamos no exponernos a temperaturas elevadas y mantener la temperatura del domicilio entre 25-27ºC, que es la mejor para no aumentar los síntomas respiratorios. Otro de las cosas que tenemos en cuenta es que el aire acondicionado, a temperaturas bajas, tampoco es beneficioso para los enfermos con EPOC, recomendando limitar su uso en lo posible y leer este post en el que hablamos del tema (http://fisioterapia-respiratoria.com/aire-acondicionado-problemas-respiratorios), para así poder actuar de la forma más correcta posible.