El nombre viene del griego emphysema, y quiere decir “soplar el aire” o “hiperinsuflar”. Es una enfermedad pulmonar crónica, englobada dentro de la EPOC, en la que se produce una destrucción del parénquima pulmonar (parte más distal del pulmón, como ahora tendemos a llamar Pulmón Profundo “PP”, donde se realiza el intercambio gaseoso), que cursa con pérdida de elasticidad, Hiperinsuflación alveolar, disminución de la capacidad de vaciado del aire durante la fase espiratoria, destrucción de la pared alveolar con una disminución de intercambio gaseoso en los mismos que produce insuficiencia respiratoria y con el tiempo en compensación de la baja de oxigeno, una insuficiencia cardiocirculatoria.
Su clínica principal es la disnea (sensación de falta de aire, con dificultad para respirar), al principio en esfuerzo y en los últimos estadios hasta en reposo.
El enfisema se caracterizan por tener bullas o ampollas de enfisema, que son: espacio aéreo de más de un centímetro de diámetro sin tejido epitelial. Si ocupa la mitad del hemitorax se llama bulla gigante, pude ser congénita, adquirida, única, múltiple….
El enfisema se clasifica de muchas formas:
1. Según la forma clínica: bulloso, obstructivo difuso y compensatorio.
2. Según localización en el acino pulmonar:
• Enfisema acinar proximal o centroacinar.
• Enfisema panacninar o panlobular. Es el más agresivo y ocupa todo el pulmón,
• Enfisema irregular.
3. Según el número de bullas.
Según el British Medical Research Council (BMRC) clasificamos el enfisema:
Grado 0: disnea ante un ejercicio intenso.
Grado 1: disnea al andar deprisa o una pendiente.
Grado2: disnea al andar en llano a una velocidad moderada.
Grado3: tener que descansar al tener que andar 100 metros o poco tiempo.
Grado4: disnea que impide salir de casa y aparece en AVD.
El diagnostico se hace en base a un cuadro clínico y los estudios radiológicos. La disnea es el primer síntoma en producirse, pudiendo acompañarse de tos, expectoración, fiebre, hemoptisis…siendo esos síntomas importantes para valorar la evolución y el tratamiento de la enfermedad.
En el centro de Fisioterapia Respiratoria tratamos el enfisema en todos sus estadios, buscando como objetivo primordial mejorar la calidad de vida de sus pacientes y cuidadores. Después de una historia clínica y estudio detenido de cada paciente se elabora un plan terapéutico, reeducando la biomecánica respiratoria, intentando aprovechar el pulmón sano.
En caso de la existencia de secreciones se realiza una higiene bronquial y se enseña al autotratamiento domiciliario.
Se realizan técnicas de inspiración y espiración dirigidas y forzadas para combatir la fibrosis pulmonar y que no progrese la enfermedad.
En las últimas fases del tratamiento se realiza una readaptación al esfuerzo, dentro de las posibilidades de cada individuo, para que no caigan el círculo vicioso del reposopérdida de capacidad pulmonarempeoramiento de la enfermedadpeor pronóstico.
La Fisioterapia Respiratoria es una de las terapias demostrada científicamente que ayuda y mejora la calidad de vida del paciente y es el complemento ideal al tratamiento convencional farmacológico, sin tener ningún efecto adverso.
Todo paciente diagnosticado de enfisema debería hacer Fisioterapia Respiratoria.